jueves, 15 de noviembre de 2012

Waiting... and waiting

Durante los casi 5 años que tiene este blog creo que he hablado absolutamente de todo. He imaginado, he llorado, he reído, he compartido penas, alegrías, ilusión, emociones, sensaciones… Durante todo este tiempo he visto como muchos blogs se crean durante la espera pero que luego se cierran al llegar la adopción a término. La espera desespera, pero pocos son aquellos valientes que nos siguen contando sus emociones cuando su desesperada espera llegó a su fin. En este punto no todos encuentran dónde está el límite de la protección infantil y hasta dónde debemos o no debemos compartir.


He escrito muchas veces sobre cómo me he imaginado durante años como hubiera sido mi asignación; cómo sería esa llamada, quién sería la primera persona a la que llamaría, a quién enviaría el primer mail, la primera foto de la asignación… pero durante estos años he descubierto que quizás nunca hubiera sido ni siquiera aproximado a lo que había imaginado. He vivido asignaciones en primera fila de gente desconocida, he vivido de lejos asignaciones de gente cercana, he cogido en brazos a bebés a las pocas horas de estar en su familia, he tardado dos semanas en poder acurrucar a otros.

Cuando llega el GRAN momento, TU momento, tus necesidades pueden ser tan diferentes, tus miedos pueden ser tan diferentes, tus sensaciones pueden ser tan diferentes…. Que quizás recurras a alguien que está a miles de kilómetros, a alguien totalmente desconocido que en ese momento se convierte en tu cómplice, en tu mejor amigo, en tu nueva familia del corazón. A veces puedes sentir que quienes te rodean, quienes te acompañaron en el camino, aquellos con quienes caminaste durante la espera no van a ser capaces de entenderte, acompañarte o sencillamente ya no te apetece compartirlo con ellos.

He aprendido muchas cosas durante este camino pero lo más emocionante siguen siendo las palabras que llegan a mi mail con vuestras historias, vuestros miedos, vuestras preguntas, vuestras fotos de asignación… Me sigue sorprendiendo ser tan afortunada y tan dichosa de poder vivir con vosotros vuestras historias, de recibir las fotos de vuestras familias, por fin completas o a la espera de un segundo viaje, un segundo juicio, una segunda opinión médica. Hoy he leído un emocionante correo de una familia de Santiago de Chile a quien envié mis cuentos que me ha hecho saltar las lágrimas. Ayer un mail de una mamá que llegó hace unos meses de Etiopía con su retoño con quién compartí sus miedos y andaduras antes de su asignación. Hace dos días una familia que está a punto de viajar a Rusia… Y os confieso que, a pesar de no conoceros, río con vosotros, me emociono con vosotros, lloro con vosotros y sufro con vosotros.

No tengo claro que algún día viva una asignación. No tengo la seguridad de que algún día sea asignada. Quizás se cierre la etapa tras “X duros años a la esepra”. Quizás sea toda la vida una “eterna a la espera”. No lo sé, pero he llegado a una conclusión; si algún día lo vivo, si algún día tengo la suerte de vivir una asignación, he decidido que las primeras personas en saberlo seréis vosotras, aquellas que seguís mi blog durante años, aquellas que me preguntáis por entradas que escribí hace ya tanto tiempo que ni las recuerdo… Mi blog será la el primero en saber que he sido mamá y a través de él todas vosotras.



10 comentarios:

Sandra dijo...

Silvia aquí estaremos acompañándole en esta espera que desespera...apoyandote cuando lo necesites, escuchándote y dándote esos abrazos virtuales que se sienten tan cerca...no dudo que algún día estaremos celebrando contigo esa asignación!

Besos.

María dijo...

Joe Silvia q emocionante!!!!! se me han puesto los pelos de punta,
Vamos a ser las primeras!!!! has leido bien VAMOS A SER LAS PRIMERAS!!!! porque ese día va a llegar si , si , si y mil veces SI!!!!
aysssssss q guay q guayyyyy!!!

muuuuasssssssss
María

marina dijo...

Silvia,cuando uno recibe la llamada,te aseguro que reacciona de una manera totalmente diferente a lo planeado,porque no sabes dónde te va a pillar ni con quién.
Yo he vivido dos y las he vivido de forma totalmente diferente por ser muy diferente las circunstancias,pero en las dos he sentido unas ganas inmensas de contarlas en el blog,a quien mejor que a todas las personas que están en el mismo carro.Espero poder vibrar con la tuya cuando llegue el momento.Un saludo.

Chiquita adorada dijo...

Hermosísima entrada, sentimiento puro!! Va a llegar el día Silvia, y los que te queremos aquí estaremos viviéndolo y emocionándonos contigo. Un abrazote lleno de esperanza, verás que llega!

Tania dijo...

Y AQUI ESTARE....
Y CREO POR NO DECIR QUE EL DIA QUE ESO PASE, GRITARE DE ALEGRIA DESDE MUY LEJOS.....
Y SE QUE ESE GRAN DIA LLEGARA...
ANIMO Y MUCHOS SALUDOS !!

María J. dijo...

Ais Silvia, ójala llegue pronto esa llamada tan esperada, es cierto que nos imaginamos las cosas de una manera que luego ni se acerca, pero lo importante es que el momento llegue, da igual lo que se haga despues o cómo se haga, pero seguro que será mágico.

Un besazo,
María J.

Meri dijo...

Segará... y aquí estaremos para recibirlo con la alegría inmensa que se merece y darte un achuch´n a trávés de las ondas.
Un besazo!

marta dijo...

Silvia y no sabes como me alegraré el día que lea la noticia que nos hizo mamas bloggeras... Entonces espero poder seguir leyendote, seguramente con menos frecuencia, pues cuando suena la llamada, el tiempo se relativiza, los momentos vuelan... y a veces pasas días, sin abrir el ordenador, y poder leer a las compis de viaje, de experiencia... Y cuando tienes un rato y te pones al día, se empañan los ojos, ries, te alegras, o te vuelven los sentimientos que antes de la llamada nos une...
Muaks

Isabel dijo...

Querida Sílvia, si que es verdad que cuando uno esta en casa hay tanto de que ocuparse que cuesta actualizar el blog con la misma asiduidad.
Yo he intentado seguir con el y aunque hay épocas de más seguia compartir con vosotros mi experiencia me sirve de mucho y aprendo mucho con vuestros comentarios y sugerencias.
Espero poder vivir contigo el dia de la llamada, soy realista y no puedo dejar de pansar que puede tardar, pero en algun momento llegará y entonces estaremos aquí pasa alegrarnos de tu felicidad.
Isa

Ali dijo...

Seguro que llegará!, tardará lo que sea pero llegará!
Ánimo!!!