martes, 31 de diciembre de 2013

Un sueño

Me desperté llorando de madrugada. Tenía el corazón encogido pero emocionado. Eran las 3 de la mañana de la última noche completa de 2013. Estaba cerca de la estación del tren rodeada de muchísima gente. Allí, delante de todos nosotros, estaban todos los niños que iban a ser asignados. No sabía qué me deparaba este hilo rojo caprichoso que se enreda y se enreda cada día más. Yo me mordía las uñas porque parecía una especie de selección de padres. Presentaban a cada niño y nombraban el nombre de la familia que debía hacerse cargo de él. 

Presentaron un niño con rasgos orientales que tenía 2 años. Llevaba una camiseta amarilla y unos pantalones azules. El pelo era corto y denso. Tenía un balón negro y blanco en las manos. Unos preciosos ojos negros almendrados y unos labios finitos y resecos. El niño permanecía inmóvil mientras lo presentaban. Nada más terminar con él pronunciaron mi nombre. No, no me desmayé... pero empecé a llorar y me temblaban las manos. Me acerqué a por aquella hermosa criatura y las manos me temblaban. Estaba sola. Mi marido estaba trabajando y además ajeno a la situación que yo estaba viviendo. 

Temblorosa cogí la mano del pequeño y empezamos a alejarnos de la multitud. Ni su padre, ni la familia ni ninguno de nuestros amigos sabían que yo estaba viviendo ese momento. El niño me miraba, me enseñó su balón y salió corriendo a jugar con otros niños. Yo le seguía el paso y caminaba a su lado sin dejar de llorar emocionada. Mil momentos se me pasaban por la cabeza. Tenía que avisar a su padre... ¡que iba a llegar a casa siendo uno más!

Cogí el móvil sin perder de vista al pequeñajo. No era capaz de marcar ningún número. No era capaz ni siquiera de sostener el teléfono con las manos. Iba a llamar a su padre y... ¿a quién llamaría justo después? Repasé la lista de todas aquella personas que en ese momento entenderían cómo me sentía. ¿Alguien me cogería el teléfono? Estaba nerviosa... muy nerviosa... y no podía dejar de llorar. 

Y justo en ese momento y con esas sensaciones y emociones me desperté. Era tan real que me sentía extraña. Un peque en casa... un peque en casa... ¿Ahora?

Ha sido un emocionante y precioso sueño para dar por finalizado este 2013. Mis mejores deseos para este 2014 a todos vosotros. 

sábado, 9 de noviembre de 2013

Señales

Creo en las señales. Es curioso porque antes nunca me fijaba en ellas pero ahora estoy muy alerta a todo lo que encuentro a mi alrededor. Decidí dar un giro a mi vida y ya estoy disfrutando de los primeros resultados. Algún día hablaré sobre ello. 

18 meses después de ofrecernos como familia educadora hemos empezado los cursos. Muy pero que muy interesantes. En el camino del acogimiento hemos encontrado a personas muy muy afines a nosotros y la verdad es que estamos entusiasmados con todo lo que estamos aprendiendo y descubriendo. Es curioso porque, además... llega quizás en el peor momento, en el momento en que carecemos de menos tiempo, en el momento en que asumimos nuevos retos profesionales que nos dejan menos tiempo libre. Pero el destino es así de caprichoso.

He decidido abrir un nuevo blog en el que iré contando nuestras peripecias en este camino que seguro que van a ser muy interesantes. No quiero mezclar ambos caminos porque aunque al final converjan, de momento son paralelos. 

Sentarse en un a sala a hablar de acogimiento y que la fecha en que tu relación comenzó esté colgada por las paredes, me parece una señal. Una INCREÍBLE y LLAMATIVA señal ¿Habremos encontrado el camino para continuar creciendo en nuestra increíble y original historia?

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Adopción y Adolescencia. Claves para comprender, prevenir y actuar ante conductas de riesgo


El próximo sábado día 9 de noviembre de 16 a 20 horas, Adopta2 organiza una interesantísima charla de la mano de un gran profesional como es Javier Múgica sobre uno de los temas que más nos interesan a los adoptantes: Adopción y Adolescencia. Claves para comprender, prevenir y actuar ante conductas de riesgo.

Paralelamemente se organiza un taller para niños de 9 a 14 años  de la mano de Flavia Guardiola. El aforo está prácticamente lleno. 

Si estás interesado escribe a info@adopta2.es y confirma tu inscripción.


viernes, 20 de septiembre de 2013

Luna llena

Hoy, noche de luna llena, repaso todas las piedras que he ido encontrando en mi camino; mi situación personal ha cambiado con respecto a la solicitud inicial de adopción internacional, los requisitos de los países se han endurecido, al intentar abrir dos países más uno cerró por guerra y el otro por irregularidades, al intentar adoptar un niño mayor (ojo, que mayor es de "más de 5 años") la administración dice que no me dan el certificado de idoneidad por ser muy joven... 

Y pasa el tiempo... y cuando me toque asignación, si algún día llega, seré demasiado vieja para un niño de los que ahora tengo que esperar. Y será entonces cuando pueda optar a un niño más mayor... ¿o no?

Dicen que cuando llegas al final entiendes por qué debiste esperar tanto. Yo, sin embargo, creo que la espera nos hará cambiar el rumbo. 

Hoy es luna llena. A miles de kilómetros de casa enciendo mi vela.

jueves, 1 de agosto de 2013

Conversaciones



J: ¿Cómo va lo tuyo?
Yo: Bien
J: ¿Pero sabéis algo?
Yo: No, no sabemos nada.
J: ¿Pero ya llevas un montón de tiempo esperando?
Yo: Sí, así es.
J: Pero... ¿se sabe cuánto falta?
Yo: No. Intuitivamente diría unos 5 años o así más.
J: Pues nada... que haya suerte.

martes, 30 de julio de 2013

Pasaje verde

Muchos de vosotros me habéis preguntado, animado, aconsejado... dejar de esperar y tramitar por pasaje verde. Debo confesar que esto es algo que me sorprende enormemente por diferentes motivos pero el más importante y principal es que la adopción por pasaje verde es una adopción que debe ser muy meditada, muy valorada, muy reflexionada, muy sopesada para que no sea un fracaso (exactamente igual que cualquier paternidad pero con un plus de necesidad especial). 

Antes de tramitar mi expediente de adopción, allá por 2007, al igual que valoramos todos y cada uno de los países, requisitos, procedimientos, tiempo de estancia en el país, seguridad en el trámite y los costes, valoramos todas y cada una de las necesidades especiales cuando el país seleccionado fue China. Ya por aquel entonces existía la adopción por necesidades especiales pero, tras meses de reflexión, consideramos que éste no era el camino que debíamos seguir. 

Los motivos fueron dos y además fueron contundentes: 

- Uno de los solicitantes tenía una discapacidad crónica  y tenía claro, clarísimo, que no quería para su hij@ aquello que él había tenido que vivir durante tantos y tantos años. No quería ver en su hij@ lo que él vivía día a día y mucho menos siendo consciente del sufrimiento que ello le provocaba. La reflexión tras meses de búsqueda de información y charlas con expertos fue: Ninguna enfermedad "buscada" bajo ningún concepto. Cuando uno de los solicitantes dice NO, el otro dice NO. 

- La adopción por pasaje verde se tramita a través de ECAI, algo que el otro solicitante tenía claro que no quería bajo ningún concepto. Cuando uno de los solicitantes dice NO, el otro dice NO. Las motivaciones para este punto son diversas. Tramitar por ECAI hubiera hecho que fuera madre hace ya tres años... pero los principios están por encima de cualquier tipo de paternidad a cualquier precio. 

Siempre que escucho lo de "¿por qué no te pasas a pasaje verde?" me recuerda a esas personas que aconsejan a otros que acojan a un menor cuando los destinatarios del mensaje son conscientes y aseguran de que no soportarían una despedida del menor. ¿Hacer algo que ya sabes que no estás preparado para ello? Cada uno sabe hasta dónde o por qué elige su camino siendo plenamente consciente de que la elección puede provocar una no llegada al punto final. 

Siempre tuvimos algo muy muy claro; "si la necesidad especial nos toca, la asumiremos pero jamás la buscaremos de forma voluntaria". Lo sé, es mucho más seguro aventurarse a un pasaje verde (en el que eliges el grado, la necesidad, etc) que encontrársela... pero cada uno es consciente de las decisiones que toma y de las motivaciones que a ello dirigen. 

Sea como fuere... quizás el camino es no llegar porque otras puertas diferentes se van abriendo. Quizás la dificultad del camino reside en provocar una reflexión que te lleve a tomar un camino diferente. 

La adopción por pasaje verde no debe ser provocada por "coger el camino rápido" sino que debe estar basada es una muy bien gestionada reflexión sobre la decisión que se toma. Y esto es común para cualquier tipo de paternidad. 

Cada uno sabe lo que está preparado o dispuesto a asumir sencillamente porque ahí reside uno de los factores de éxito o fracaso en el largo camino de la paternidad. 

domingo, 28 de julio de 2013

5 años esperándote

Regalo de papá. Andrea, papá y mamá tirando fuertemente del hilo rojo.
Dice mi madre que cuando yo tenía 9 meses e íbamos a comprar a la tienda de toda la vida me sentaba en el mostrador de la tienda y desde allí le iba indicando todas aquellas cosas que tenía que comprar. Cuenta ella que tuvo que responder muchas veces a la pregunta de si era enana porque hablaba muy alto y muy claro pero era tan pequeña (estatura normal de 9 meses) que la gente pensaba que era enana. 

Cuenta también que no es capaz de recordar la edad en la que yo empecé a decir que cuando tuviera hijos serían chinos. Dice que la familia y aquellas personas cercanas me decían siempre "¡pues tendrás que casarte con un chino!" pero que sorprendentemente un día empecé a contestarle "o los adoptaré". 

No había ni una sola persona en la familia adoptada por lo que no era un tema de conversación de temática habitual en casa aunque años después, tras el fallecimiento de una persona de la familia, supimos que días antes de morir alguien le contó que era adoptada. Nunca tuve la oportunidad de preguntarle por su historia. 

Apenas tenía 18 años cuando empecé a buscar información sobre la adopción en China; revistas, recortes, cuentos sobre el tema y buceo por aquel no tan asiduo internet. Mi dominio del inglés era escaso puesto que yo había estudiado francés hasta la fecha pero aún así, buceaba en todos los idiomas que encontraba y, diccionario en mano (mi biblioteca de diccionarios es bastante amplia) conseguía aprender algunas cosas que para mí eran un gran descubrimiento. En aquel mismo año en que yo cumplía los 18 años, nacía AFAC, la asociación de familias adoptantes en China. 

Poco a poco supe que la fecha en que podría presentar mi expediente de adopción era el 11 de enero de 2008, el día de mi 30 cumpleaños. Debía estar casada al menos 2 años, debía tener trabajo y una vida estable. Hasta entonces no podía hacer absolutamente nada. Descubrí lo que eran las ECAIS y tuve claro que jamás tramitaría a través de una de ellas. 

Durante años descubrí blogs, conocí personas maravillosas a las que no conocía pero con quienes lloré a través de una pantalla en sus asignaciones y desesperanzas. En mayo de 2007 el corazón se encogió cuando China endureció los requisitos para adoptar en aquel país. Nada más ver la noticia repasé todos los puntos uno a uno, puesto que penas faltaban unos meses para mi cumpleaños. ¡Los cumplíamos! pero debo reconocer que el corazón palpitaba muy muy fuerte mientras los leía. 

Dos meses antes de cumplir los 30 años, con todos los deberes hechos y cumpliendo todos los requisitos exigidos, presentamos la solicitud de adopción. El expediente tiene la fecha del día de mi 30 cumpleaños. Parecerá una tontería... pero presentando el expediente dos meses antes... ¿por qué iba a coincidir la fecha? ¿Sería que llevaba toda la vida esperando que llegara? Nunca me ha importado cumplir años, pero nunca jamás he tenido tantas ganas de tener una edad como la de cumplir 30. 

Formación, entrevistas, documentación, papeleo, certificados, carreras, llamas y colas, muchas colas, separaron aquella fecha del 28 de julio de 2008, fecha en la que nuestro expediente tuvo entrada en China. 
Regalo de Andrea, tu prima

Muchas, muchísimas cosas han pasado desde entonces... Y hoy vuelve a ser día 28. Mentiría si digo que llevo 5 años esperando. Mentiría si digo que llevo 10 años esperando. Casi me aproximo si digo que llevo 20 años esperando pero sólo yo, sólo mi corazón en días como hoy, sabe lo que realmente pesa esta vida dedicada a una espera incierta que no sólo desesperanza, sino que también duele. 

Hace 5 años la espera de la llegada del menor estaba en tres años. Hoy está en 7. Ya llevamos 5. Nuestro expediente depende de un hilo pero siento con certeza que a fecha de hoy está vivo. Lo que ocurrirá a partir de ahora es incierto. Y saber que tras muchos años de espera puede que nunca lleguemos al final... DUELE. 

Hoy podemos decir que, por fecha de registro, esperaremos 5 años menos. 5 años menos no para llegar al final, sino para saber si llegaremos o no al final. Una dura carrera de fondo que, en días como hoy, pasa factura. 

5 años menos. 5 años menos. 


sábado, 29 de junio de 2013

Ayer fue 28... casi 5 años ESPERÁNDOTE

Ayer fue día 28 y ni siquiera me di cuenta. Ayer no miré la fecha, no tuve que escribirla en ningún momento, no miré ni una sola vez el calendario. Ayer no me di cuenta de que dentro de un mes hará 5 años que alguien estampó la fecha 28 de julio de 2008 en nuestra solicitud de adopción, allá en china. 

Ayer fue 28 y creo que por primera vez en estos casi ya 5 años... olvidé que era 28. 

Los días pasan, las cosas cambian, la vida nos encamina hacia otros lugares y nuestros deseos e ilusiones también cambian. 

Ayer fue 28.

domingo, 2 de junio de 2013

Fichas de Póquer

Hace muchos años aprendí que la paternidad no es una propiedad, sino una responsabilidad de crianza. Hace muchos años también aprendí que la paternidad consiste en hacer de tu hijo la mejor versión de sí mismo que pueda ser. 

Ayer estuvimos en unas jornadas sobre "apego y resiliencia" y aprendimos, entre otras muchas cosas, que la vida de nuestros hijos dependerá de las fichas de póquer con las que les dotemos para enfrentar cada día. Nuestros hijos, adoptados o acogidos, parten en la vida con muchas menos fichas que el resto. Y para todos los que no lo habéis visto todavía, aquí os dejo una maravilla de vídeo. Espero que os guste. Merece la pena. 


martes, 28 de mayo de 2013

4 años y 10 meses desde fecha registro

¿Quién decide cuando acaba lo viejo y empieza lo nuevo? No es un día del calendario, ni un cumpleaños, ni un nuevo año... es un acontecimiento… grande o pequeño. Algo que nos cambia, que nos da esperanzas. Una nueva forma de vivir y contemplar el mundo que deja marchar los viejos hábitos, los recuerdos. Lo importante es saber que siempre se puede volver a empezar. Lo importante es recordar que entre todo lo malo siempre hay cosas a las que merece la pena aferrarse [Anatomía de Grey]
4 años y 10 meses desde la fecha de registro en China. 5 años, 6 meses y 2 días desde que empezamos a desenredar el hilo. Mucho tiempo. Muchos días. Hace unos meses una amiga y seguidora de este blog me comentaba que si al poner el título a este espacio y llamarle DESENREDANDO EL HILO ROJO no estaría ya adelantándome a lo que este camino significaría. Nunca lo había pensado... pero ahora lo pienso muchas veces. 
Muchos años, muchos meses y muchos días desde que empezó esta aventura hacia la maternidad y han cambiado tantas y tantas cosas desde entonces que en estos momentos nada es igual al comienzo. Nada… absolutamente nada… ni siquiera yo.

martes, 21 de mayo de 2013

Ocupada

Dicen que nadie está tan ocupado como para no encontrar tiempo para contarle a todo el mundo lo ocupado que está.

Y eso es exactamente lo que me ocurre a mi; que no tengo tiempo casi ni de respirar. He recibido varios mensajes preguntándome si estoy bien, por qué no aparezco por facebook, por qué no visito los blogs o actualizo el mío... Estoy bien y muchas gracias por preocuparos por mi pero es queeeeeeeeeeeeeeeeee... Imagino que el destino ha decidido ocupar totalmente mi tiempo en el trabajo para no pensar no sólo en la adopción sino en mis vacaciones. ¡Y eso de no tener tiempo de organizar mi ruta para este año me molesta muchísimo!

Pero encontraré el momento... al menos para lo segundo. A ver si lo consigo. Al menos el billete ya está reservado.

lunes, 29 de abril de 2013

4 años y 9 meses

Ayer fue día 28. Hemos pasado el finde perdidos entre la niebla en una casa sin cobertura móvil a menos que subiéramos al tejado. No sabía que cambiar de compañía y perder la conexión iba a ser tan sumamente gratificante; sin teléfonos que suenen, sin trabajo, sin internet... Plena dedicación a los libros y a aquellos que te rodean. Naturaleza increíble bajo la niebla que tanto me gusta. Agua, agua, frío, chimenea y calor familiar.
 
Ayer hizo 4 años y 9 meses que esperamos y por primera vez en tantísimo tiempo debo confesar que estoy feliz de ser 2 hasta el punto que empiezo a plantearme si de verdad no quiero que seamos 2 para siempre.
 
Y es que hay muchas cosas increíbles siendo dos. Y el tiempo pasa... Y nos hacemos mayores y, lo que es más notorio... mucho más cómodos.
 
En fin... el tiempo dirá si el destino está cambiando mi rumbo hacia una no maternidad deseada y elegida. Dicen que todo pasa por algo... ¿será por esto que no he sido madre? El silencio, la tranquilidad, el ir a tu ritmo, el dormir cuando te apetece, el salir corriendo de cena o de viaje sin pensar en lo que tienes que llevar, el preparar tu próximo viaje sin tener en cuenta el colegio...

lunes, 15 de abril de 2013

Nacer


El otro día una gran amiga me dijo una frase que no me ha dejado indiferente y en la que no puedo dejar de pensar. Ella acaba de ser mamá y me dijo lo siguiente: 

Te das cuenta de que la espera mereció la pena porque simplemente, tuvimos que esperar a que ella naciera.

Cuando ves que todos tus amigos y familias de alrededor buscan su segundo hijo tú te miras y te dices... "o estoy esperando a que nazca... o es que éste no es mi camino"

Ojalá sea cierto... ojalá amiga tengas razón. Ojalá sencillamente estoy esperando a que nazca. 

jueves, 28 de marzo de 2013

4 años y 8 meses... y seguimos esperando

 
 
A veces lo que esperas es peor que lo inesperado. La razón por la que nos aferramos a nuestras esperanzas es, sencillamente, que lo que esperamos es lo que nos mantiene vivos, en pie, esperando. Esperar es sólo el comienzo aunque lo inesperado es realmente lo que cambia nuestras vidas.
 
Hoy hace 4 años y 8 meses desde la fecha de registro de nuestro expediente en China. Y seguimos esperando lo inesperado.

domingo, 17 de marzo de 2013

17 marzo - Día de encuentro de LY

Hace apenas unos minutos nuestros queridos amigos Susana y Dani del blog Construyendo una familia se han encontrado por fin con su pequeña LY. Ha sido un encuentro de ensueño y la peque y los papis se encuentran perfectamente. 

Estaba en la ducha cuando mi marido entra corriendo "corre, corre, que están, que están". He salido de la ducha corriendo, llena de jabón, me he enrollado en el albornoz, me he secado los pies y he corrido frente al ordenador. Y allí estaban... POR FIN LOS TRES JUNTOS. Emocionados, tranquilos, felices... y dándole de comer a LY. 

Hoy somos POR FIN uno más en la familia del corazón. Uno más real, de carne y hueso (porque ya lo hemos celebrado con su foto sobre la mesa en alguna ocasión). Hoy por fin habéis podido mirarla a los ojos, tocarla, olerla, sentirla... Un momento muy pero que muy especial. Gracias por compartirlo con nosotros. 

Os deseamos una muy feliz estancia en China, un país que ya nunca os dejará indiferentes. El país que vio nacer a vuestra pequeña.  

martes, 12 de marzo de 2013

Cansada de esperar

Hay días en los que, sencillamente... estoy cansada de esperar. Así, sin más. Y siento que no es la espera lo que marca, sino la incertidumbre de que a pesar de que pase muchos años esperando... puede que nunca llegue al final. 

Y son esos días en los que me pregunto por qué no cierro las puertas, por qué no dejo de esperar, por qué no soy capaz de pasar ni un sólo día sin pensar en que espero. 

Y es entonces cuando me pongo fechas, cuando me pregunto si la familia que hoy tengo es la misma que será cuando llegue el momento. ¿Seguiré teniendo fuerzas o las habré agotado en el camino? 

Hoy, sencillamente, estoy cansada de esperar.

jueves, 7 de marzo de 2013

La fiesta de NO PADRES


Me gustan las fiestas pero no todo tipo de fiestas sino las que se organizan entre seres queridos. Me encanta organizarlas pero reconozco que es agotador así que únicamente organizamos dos fiestas al año en casa que intentamos hacerlas coincidir con carnaval y Halloween. Sí, somos así de raros, ¿qué le vamos a hacer? Aun así,   siempre aprovechamos cualquier festejo para hacer todas esas cosas que siempre quisimos hacer o de las que siempre quisimos disfrutar. A fecha de hoy, entre otras, hemos metido a un mago en una caja para sorprender a una enana, hemos disfrutado de la gala de los Óscars al más estilo Hollywoodiense, hemos disfrutado de un día de buceo, de un día en catamarán, se ha colado un payaso en mi casa, hemos disfrutado de Peter Pan… 
Pero este sábado tenemos una fiesta a la que nunca antes habíamos sido invitados: “La despedida de NO PADRES”. Sí, tal cual. Será el penúltimo fin de semana que nuestros queridos amigos Susana y Dani, tras muchos años de espera, sean dos. ¿Y qué mejor manera de disfrutarlo que con una despedida de NO Padres? La idea me encanta, la invitación es preciosa y la compañía también así que debo confesar que estoy emocionada con la idea… “despedida de no padres, despedida de no padres…” Suena bien, ¿verdad? 
Y pensando en ello me pregunté si algún día yo celebraría esta fiesta. No la podré llamar “la despedida de NO PADRES” puesto que nosotros somos padres a fines de semanas alternos. Y fue entonces como rápidamente se me ocurrió cómo llamaría a nuestra fiesta. Ya veo la decoración de mi casa, ya veo la comida sobre la mesa, ya sé quiénes estarían allí. No sé cómo será la foto que presidirá el acontecimiento porque no soy capaz de imaginar cómo o quién será nuestro hijo (¿será que el hilo rojo anda perdido por el universo?) pero veo las caras a nuestro alrededor, las lágrimas emocionadas, el estrés de no saber muy bien cómo encajar tanta espera atrás con una llegada para siempre. Miro a mi alrededor y veo las caras de todos los que están allí; algunos incrédulos, otros lagrimosos, otros peleando con sus pequeños que hoy siendo bebés en mi fiesta ya superan los 6 años. Unos entienden perfectamente lo que sentimos; el sufrimiento dejado atrás, el miedo, la incertidumbre de un viaje en el que nos puede deparar grandes sorpresas. Otros, sin embargo, ajenos a la adopción, sencillamente disfrutan el momento. Con la casa llena de gente, luz e ilusión repaso mentalmente todas esas preguntas que tantísimas veces me hice; ¿dónde queda la espera? ¿qué se siente cuando sabes que estás asignado? ¿qué se siente cuando ves la cara de tu hij@ por primera vez? Estoy absorta en mis pensamientos… por fin… por fin. Sólo con describirlo  me he trasladado allí. No tengo palabras y las lágrimas intentan salir de mis ojos. ¿Llegará ese momento? El hilo sigue muy enredado pero… ¿lo desenredaremos? 
Un cartel que indica el nombre de nuestra fiesta cuelga de la puerta principal:  DesenREdado el hilo rojo.
 
Felicidades amigos... lo habéis conseguido. Os ha costado, habéis luchado, habéis sufrido, no habéis disfrutado hasta el final... pero LO HABÉIS CONSEGUIDO. La aventura empieza en breve, la verdadera aventura de ser padres. Os queremos.

lunes, 4 de marzo de 2013

Lacomba y yo

Cuenta la leyenda que existe un hilo rojo que une a todas las personas que algún día estarán juntas, a pesar del tiempo, a pesar de las circunstancias. Dicen que el hilo se puede enredar, se puede tensar, pero que jamás se puede romper.  
Y así fue como el día 30 de octubre de 2008, mientras buscaba ilustrador para arrancar mi proyecto de los cuentos, encontré un mensaje en una web online que decía: “me encantaría ilustrar un cuento infantil”. No ponía nada más. El nombre, la ubicación, la forma de dibujar de aquella persona era totalmente desconocida. No había mail ni ningún dato de contacto así que decidí darle a “responder a este anuncio” comentándole que había leído su mensaje en una noticia y que quería contactar. Ese mismo día recibí el siguiente mensaje: “Estimada Silvia, dime de q trata y te hago llegar algún dibujo para q lo valores, te agradezco tu respuesta. Un saludo”. Al día siguiente, ilusionada porque estaba un tanto colapsada de navegar y navegar a la búsqueda de alguien que pudiera entender, comprender e ilusionarse con mi proyecto, le escribí. Le conté brevemente que quería ver alguno de sus dibujos, que el proyecto trataba de una adopción internacional y que buscaba a alguien que fuera capaz de transmitir lo que yo quería expresas con mis palabras. Buscaba a alguien con una sensibilidad especial, alguien capaz de meterse en la piel de un menor adoptado, alguien que fuera capaz de transmitir con imágenes lo que yo no era capaz de expresar con palabras.
No le mandé el texto, pero sí le expliqué qué buscaba. Quizás necesitaba más a alguien que me acompañara en el proyecto y se emocionara con él que a una persona que supiera dibujar. Lo que jamás imaginé era lo que el destino me tenía reservado.  

Apenas unas horas después de aquel 31 de octubre de 2008, 11 meses antes de que Esperándote viera la luz, recibí un mensaje que me hizo saltar las lágrimas. El mensaje empezaba así:  No sabes lo feliz que me haces con tu proyecto, ¿sabes que yo soy adoptada? me entere con 23 años y resultó que provenía de una familia italiana. Hoy día las dos familias se conocen” Junto a otro mensaje, minutos después, me llegaba la siguiente imagen:
Sobran las palabras, ¿verdad? Porque yo veo China en esta imagen. Yo todavía no había sido capaz de contarle nada sobre mí. No le había hablado de mi blog, no sabía absolutamente nada de mi adopción internacional en China. Recibir esta imagen tras las anteriores palabras hicieron que supiera que sería ella, Maria José Lacomba, quien debía ilustrar el cuento. ¡NO podía haber tanta casualidad! Supe posteriormente que ella vivía en el lugar de origen de mi padre y que yo vivía en el lugar que la vio nacer. Casualidad o destino, no lo sé… pero así fue como esta historia comenzó.  
Desde aquel momento hemos compartido muchísimas cosas; ella me ha acompañado en mi trayecto hasta hoy en vano hacia la maternidad adoptante y yo la acompañé en un momento durísimo de su vida. Ella no sólo fue adoptada, sino que además tuvo que enfrentarse a otro abandono muy duro en su existencia. Madre de cuatro preciosas criaturas ha tirado hacia delante como ninguna persona de las que hasta hoy conozco. ¡Y no sólo eso! Sino que además ha tenido la fortaleza de hacerlo sola, sin ninguna ayuda profesional. Es una MAMÁ con todas las letras de la palabra, una persona GRANDE donde las haya. Una luchadora incansable, inteligente y muy pero que muy especial.  
Juntas creamos los tres cuentos. Esperándote llegó 11 meses después de conocernos. ¿Por qué no estuve en la barriga de mamá? Es la pregunta que ella, como adoptada, nunca se hizo. “Cuando descubres que eres adoptada con 23 años ya no te preguntas estas cosas –me dice”. Tiku y su adopción llegó el último, no estaba previsto, pero era mi pequeño homenaje hacia ella. Ya conté un día que cuando Maria José era pequeña y desconocía su origen, soñó que su mamá era una canguro que no tenía bolsa marsupial y que para poder llevarla consigo se cosía una bolsa en la tripa. A partir de esta historia creamos a Tiku que, a día de hoy, remueve sentimientos entre los más pequeños.  
Hace unos meses me regaló quizás uno de los regalos más preciados que me han hecho en la vida; ser la madrina de su recién llegada hija. Yo sé lo que para ella significa este hecho, pero yo jamás pensé que tan preciado regalo me fuera ofrecido a mí. La pequeña Giulietta llegó el pasado día 16 de febrero a las 23.30 horas y es uno de los bebés más bonitos que he visto en mi vida. El pasado día 1 de marzo la tuve en brazos por primera vez y debo confesar que la sensación fue indescriptible… uno de esos momentos en los que no existen palabras para expresar los sentimientos que se generan dentro de ti.  
Ha sido un fin de semana muy especial. Sin duda alguna. El destino, a veces caprichoso, me sigue sorprendiendo. Anoche, ya en la cama, pensaba “quizás nunca llegue a saber lo que es ser madre, pero habré conocido a tantas personas especiales en el camino que nunca podré decir que no ha merecido la pena intentarlo”.

domingo, 17 de febrero de 2013

365 experiencias con tus hijos

Nos encanta viajar, nos encanta hacer cosas diferentes y enriquecer nuestras vidas y las de las personas a las que queremos más de experiencias que de cosas materiales. Siempre intentamos "regalar experiencias" cuando hacemos regalos o al menos regalar aquellas cosas que sugieran o inviten a vivir experiencias. 

Además de blogs y páginas de adopción devoro páginas en las que se hacen viajes con niños. Llevaba tiempo detrás de este libro y debo decir que me encanta, que es uno de los más completos para regalar estas experiencias a los más pequeños. 

En este libro, 365 experiencias con tus hijos, podrás encontrar diversas actividades para realizar al aire libre, disfrutar de la naturaleza, de los animales, de la gastronomía, del agua, de la montaña, de un hotel especial... Son ideas originales dirigidas a todas las familias que buscamos vivir experiencias originales. 

Son 365 experiencias, gratuitas o no... que no dejarán indiferente a ninguna familia... Todo depende de lo que cada familia sea capaz de aportar a estas 365 experiencias. 


lunes, 28 de enero de 2013

28 ene 2013... 4 años y medio ESPERÁNDOTE

El número 15 se ilumina en rojo en la pantalla y sonrío. La "niña bonita" pienso. Y sonrío. El cielo está raso y el viento ha cesado. La luna llena de anoche está perezosa y no se quiere esconder. Pienso en nuestra vela roja de anoche y en cuántas velas más se encendieron... ¿con qué motivos se encenderían? Imagino que serán muchos y muy diversos. 

Me pregunto cuántos adoptantes encendieron anoche una vela. Me pregunto cómo quedarán si colocamos esas velas una tras otra delante de la luna. ¿Hasta dónde llegarían? De momento la luna queda a mi espalda pero espero a la rotonda para volver a mirarla de frente.

Me pregunto si desde China la luna se verá igual de redonda y bonita. Allí ya estarán comiendo o ya habrán comido y la luna habrá desaparecido de su cielo. Son las 7:42 de la mañana. Hoy es día 28. Hace exactamente 4 años y medio desde que algún funcionario colocó el 28 de julio de 2008 sobre nuestra solicitud de adopción. Sonrío. Poco tiempo antes, cuando se gestó en nosotros la decisión de adoptar, las asignaciones estaban tardando 2 años y medio. Hoy hace 4 años y medio que esperamos y nos quedarán  al menos, otros 4 más para saber, sencillamente, si el expediente es o no viable. Quizás pasen 8 años y únicamente podamos ver cómo los sueños de tantos y tantos años se diluyen en el tiempo para desaparecer. Quizás nunca conozcamos a nuestro hijo... pero esto no lo sabremos hasta que la asignación esté próxima . No queda otra que seguir esperando. 

Hoy mi corazón sonríe. Me he dado cuenta de lo afortunada que soy sencillamente porque la vida me ha puesto delante un nuevo reto laboral que consume absolutamente todo mi tiempo. Ahora ya no tengo esas horas extras en casa que antes dedicaba a la adopción. Acabo el día tan agotada que únicamente tengo tiempo de recordar que sigo esperando... así, sin más. 

Creo que el destino se ha apiadado de mí dándome una tregua, ocupando mi mente en cosas tan importantes y diversas para mí que ya no puedo dedicar a la adopción tantas horas de mi vida. Estoy segura de que el destino no lo hace por casualidad; él sabe de mi dolor, él conoce mejor que nadie mi llanto y esta terrible espera que alcanza cada vez más meses. El destino está de mi lado porque hoy, cada vez que he buscado la fecha en el calendario, he sonreído. Mi corazón sonríe feliz sencillamente porque es 28... y porque no tengo más tiempo de pensar en esta espera tan enfermiza, esta espera tan incierta. No es la espera lo que me estaba consumiendo, sino la incertidumbre de saber que quizás tras años y años de espera, mi sueño de maternidad se convierta en nada. 

Aún así... he tenido que celebrar este día. Hoy me he dedicado unos minutos para escuchar una de las canciones que me hace estremecer el alma cuando la escucho. No sé si seré madre algún día pero si lo soy será exactamente como dice en esta canción; "Con la lluvia de invierno, con mis primeras canas, llegaste a mi vida..." Porque estoy segura de que si algún día esta eterna espera llega a su fin... será invierno (quizás en mi cumpleaños) y tendré muuuuchas canas. 


domingo, 20 de enero de 2013

La tarta de los deseos

Ayer tuvimos en casa la celebración de mi cumpleaños. Algo curioso que ocurre cuando celebras tus cumpleaños fuera de casa (en algún lugar lejano del mundo mundial) es que tanto tu familia como algunas personas allegadas se olvidan totalmente de ponerle unas velas al pastel o de hacerte un regalo. No es que me importe porque por suerte no necesito nada y las fiestas que me apetecen las montamos en casa pero me resulta curioso puesto que aunque yo no vea a alguien el mismo día de su cumpleaños... le entrego su regalo o le pongo las velas de su tarta cuando le veo. ¡Pero no todos somos iguales! ¡Y no podemos pretender que el resto de personas lo sean!

Sea como fuere... me encanta el día de mi cumpleaños y ayer lo celebramos en casa con unos amigos. Iba a ser una merienda entre amigos y así fue hasta que sonó el timbre de la puerta: 

- ¿Sí? -dije yo.
- ¿Silvia? Abre... soy yo -dijo alguien 
- ¿Y tú quien eres? -pregunté
- Pues yo...¡quién voy a ser! -dijo la voz al otro lado

No tenía ni la menor idea de quién iba a subir por el ascensor. NI la menor idea. Os puedo asegurar que pensé en todo; un enano, un bombero, un gigante, un cabezudo... 

Abrí la puerta y esperé cuando escuché que el ascensor paró en el piso de abajo: 

- ¿Es aquí? -preguntó la voz
- Noooo -dije yo muerta de risa-. ¡Es uno más arriba!

Unos segundos después para el ascensor en el piso encima del nuestro.

- ¿Es aquí? -volvió a preguntar la voz
- Noooooooooo -volví a decir yo-. ¡¡Es justo en el piso de abajo!!

De momento se abre el ascensor y sale un payaso con una maleta viajera, una bicicleta enana y una bola del mundo que venía a hacernos una visita para celebrar mi cumpleaños. 

Tomamos asiento y pasé una tarde rodeada de amigos y muerta de risa a carcajada limpia. Hoy todavía me duelen las costillas de tanto reír. 

El payaso se marchó pasada una hora y media o así (no tengo noción del tiempo que pasó) y tras una "picaeta" como decimos por aquí abrí mi tarta. Mi querida amiga me había dicho que no era nada especial, que no le había dado tiempo hacer nada y que sólo era un bizcocho. Me supo mal porque sentí que le había quitado tiempo y que yo podía haber comprado la tarta en cualquier lugar pero cuando la destapé... se me erizó la piel y sentí incluso ganas de llorar... ¡pero de emoción! Unos gusanillos me recorrieron la tripa, la piel bajo la ropa se erizó... y es que aquí os dejo una foto de la tarta... ¡Es exactamente igual que mi colcha de los deseos!


Así que sin saberlo, sin haber nacido todavía... querido hij@... estabas aquí no sólo en mi mente, sino también en mi tarta de cumpleaños.

Mis amigos lo sabían... ellos sabían lo que para mi significaba esta tarta porque sólo ellos, los adoptantes, saben que desde que decides entrar en la adopción no pasa ni un sólo día en el que no pienses en tu espera. 

Y es esto, unido a que estoy totalmente segura de que el día de mi cumpleaños está unido a mi adopción de una forma especial. No sé si algún día veré el final de este hilo rojo pero si lo veo... estoy segura de que o la asignación o el viaje llegará el día de mi cumpleaños... Lo que no sabemos es, primero si llegará... y segundo ... ¿de qué año?

Muchas gracias, queridos amigos y amado compañero de aventura, por la tarde de ayer. Estará sin duda en mi calendario de la cocina del próximo año como uno de los BEST MOMENTS de 2013.

jueves, 17 de enero de 2013

De vacaciones

Llevo un tiempo desconectada y el motivo no ha sido otro que las vacaciones. Cogí las vacaciones después de terminar las fiestas y claro... he vuelto después de todo el mundo. 

En enero celebro mi cumpleaños. Es un día que me encanta y que desde hace unos años decidí que uniría el día de mi cumpleaños con lo que más me gusta hacer; VIAJAR. Así que este año nos escapamos unos días a la preciosa Estambul la cual nos regaló, además, una nevada increíble que hizo que la ciudad fuera la más romántica del mundo. 

Este año hemos viajado con mi sobrina puesto que su regalo de cumpleaños era un viaje internacional y éste ha sido el destino elegido. Debo decir que Estambul es un destino muy chulo culturalmente para niños y que el trato de los turcos hacia los niños es increíble; mi sobrina se sintió como una princesa. Entre la nieve, la buena comida y el trato... ha sido un viaje muy especial. 

El día de mi cumple me despertaron unas preciosas mariposas de papel revoloteando por mi cabeza con unos mensajes preciosos. Luego abrí mi regalo; unos mapas para rascar en los que debes ir descubriendo los lugares que has visitado y después nos marchamos a celebrar el cumple de forma especial: este año tocaba un hammam turco. Para poder disfrutarlo los tres juntos (puesto que los baños turcos en Estambul no son mixtos) debimos acudir al único mixto que hay en la ciudad; el Hammanm de Sultanahmed. Allí disfrutamos de la sauna, del peeling y del masaje que hizo que los tres quedáramos de lo más relajados. 

El año pasado lo celebramos en Bangkok con un masaje tailandés. Este año ha tocado un hammam turco en Estambul... ¿qué haremos el próximo año? Mmmmmmmmmm... ya voy pensando. 

Muchas veces la gente me pregunta por qué me llevo a mi sobrina a los viajes. Para mí, viajar es la mejor cultura que puedes tener y creo que esto se aprende en la infancia. Estoy totalmente segura de que mi sobrina será una gran viajera de adulta y su tía le está enseñando todos los trucos para viajar donde quiera de forma económica. Son muchos los motivos por los que creo que los niños deben viajar: 
Porque aprenden geografía: ahora sabemos dónde está el Mar de Mármara, el estrecho del Bósforo, el cuerno de Oro, cuál es la capital de Turquía...etc ¡Y no ha hecho falta un libro!
Porque aprenden historia: los otomanos, los griegos, los turcos, el imperio bizantino... ahora todo reside en la cabecita de mi sobrina. 
Porque aprenden economía: ¿qué moneda se utiliza? ¿Cómo está el cambio? ¿por qué no utilizan la misma moneda que nosotros?
Porque aprenden sobre la gente y la cultura; ahora sabemos que hay que descalzarse para entrar en una Mezquita, que los musulmanes no comen cerdo ni beben alcohol, el idioma que se habla, los dialectos... etc, etc. 
El respeto: me parece realmente importante enseñarles a respetar otra cultura por muy diferente que sea a la nuestra. 

Y es que yo creo que el mejor regalo que le podemos dejar a los nuestros es, sencillamente, descubrir con los ojos lo que otros tienen que aprender con los libros. 

Dime algo y lo olvidaré. Enséñame algo y lo recordaré. Hazme partícipe de algo y lo aprenderé para siempre. 

jueves, 3 de enero de 2013

PayaSOSpital


Payasospital es una asociación no lucrativa que alegra la vida de los niños y niñas que se encuentran hospitalizados en la Comunidad Valenciana. Los payasos realizan actuaciones regulares profesionales adaptadas a cada niño y coordinadas con el personal sanitario. Su misión es contribuir a mejorar la calidad de vida de los menores, de sus familias e incluso del personal que les atiende desdramatizando el entorno médico y ofreciendo momentos de relax, humor, risa y fantasía. Es muy importante que la risa y la diversión formen parte de la curación.


El Espectáculo UN DÍA DE CURA Y LOCURA se representó ayer en Alicante. Disfrutamos enormemente con ellos, nos reímos a carcajadas con el “Dotor Max Recetax”, con el “Doctós Càpsulo Prentendós”, la “Doctora Pili Dora Comprimida”, con Teo Mómetro, Doc Tornillo, la enfermera Paquita Tiritas… ayssss, qué tarde más buena por una sencilla y económica aportación solidaria. Una preciosa tarde que animó y conmovió a adultos y niños con su labor.
 
En ningún hospital debería faltar una sonrisa. Si queréis leer el diario de un payaso de hospital podéis hacerlo desde aquí.