Burro-cracia

Ir a legalizar tu boda y encontrarte que 2 años y 1 mes después de la sentencia de divorcio de tu marido sigue casado con su ex... No tiene precio.

Según el Registro Civil... no consta su divorcio. Tomaaaaaaa...

Sin duda... más obstáculos... más burro-cracia. ¡Nos han tocado los 10.000 obstáculos!

Hijo mío... no sé si algún día podré contarte CUÁNTO nos costó llegar a ti.

28 de junio

3 años y 11 meses desde que nuestros sueños descansan en China. Unos cuantos meses más desde que esperamos. Hoy de nuevo día 28 y sentimientos a flor de piel. Hoy sé que estamos mucho más cerca de lo que estábamos hace apenas un mes. Hoy sé que llegaremos al final, sin lugar a dudas. El proyecto HILO ROJO sigue en marcha. Feliz 28.

Y es por ello que hoy me quedo con las palabras de alguien que me quiere quiere y nos acompaña. Alguien que vive este camino con nosotros y que sufre con nosotros... Bellas palabras que me hizo llegar ayer. Muchas gracias amiga

"Ya se sabe que en las olimpiadas unos hacen los 100m lisos y a otros les toca los 3000m obstáculos, pero con tesón todos llegan a la meta, mira hacia adelante y sigue corriendo. Besos"

Tiku y su adopción

Llegan las vacaciones. Tiku y su adopción es el hermano desconocido de los dos anteriores cuentos; Esperándote y ¿Por qué no estuve en la barriga de mamá?

Pero Tiku hace algo que los dos anteriores cuentos no hacen; trabajar los miedos. Llega el periodo estival, las largas vacaciones y Tiku os ayudará a encontrar una forma sencilla de hablar sobre los miedos que los más pequeños sufren. 

Tiku y su adopción se plantea como un libro-juego en el que cada pequeño va eligiendo la historia que quiere leer. 

Es un libro para leer en familia, para trabajar en familia... perfecto para periodos estivales. El cuento cuesta 13,50 y los gastos de envío 1 euro. Escríbeme a info@adopcionencuento.es si quieres más información. 

Lee en familia este verano. El juego y la lectura transmiten seguridad. El juego y la lectura estimulan la curiosidad y la diversión herramientas básicas para construir y reforzar el vínculo y el apego seguro.

No eres realista

No eres realista, Silvia –me dijeron-. Baja ya de esa nube en la que te has subido y abre los ojos a la realidad que tienes. No llegarás al final. Tu hijo no vendrá nunca de Oriente. Este proyecto es inviable totalmente. Vas a esperar en vano durante años para recibir una respuesta que ya conoces sin necesidad de esperar a que te la digan. Debes ser racional, debes asumir la situación y punto. ¿Por qué sois tan cabezotas los adoptantes? ¿Por qué te agarras a un clavo ardiendo? ¿Por qué no quieres ver la realidad que tienes delante? Parece mentira que no conozcas cómo son en China. No estás siendo objetiva, asúmelo-.

Yo lloraba a moco tendido al otro lado del teléfono. Recuerdo perfectamente dónde estaba, cómo lloraba amargamente, el olor, el color del día y principalmente cómo entraban esas palabras como cuchillos afilados dentro de mi.

Quiero intentarlo todo, absolutamente todo –le dije-. Es mi familia, mi proyecto familiar y necesito hacer todo lo que esté en mi mano para llegar al final del camino. Llámame loca si quieres pero estoy segura de que algún día viajaré a China a buscar a mi hij@. No sé cómo se va a producir el milagro ni dónde está la clave pero son demasiados años de espera, demasiada vinculación con ese país, muchos proyectos allí en los que he participado para que ahora, así, sin más, todo esto se vaya a tomar por saco. Llámame loca, pero por favor necesito cerrar todas las puertas para saber que ya no puedo hacer nada más. 

Esta conversación tuvo lugar hace un año y dos meses. Hoy, tras otro intento de cierre hace unas semanas  y tras otra intensa lucha que ha durado más horas de las debidas… VEO  las puertas abiertas. Hoy tengo que decir que no estoy loca, que mi lucha no fue en vano, que no soy ilusa, que tantas noches sin dormir, tantas ojeras, tanto dolor extremo en el pecho tenía una explicación y es, sencillamente, que debía ser cabezota. La más cabezota del mundo porque, si no lo hubiera sido, este camino se hubiera cerrado hace tiempo.

Y es que… cuando es tu hij@ quien está en juego… te conviertes en una pantera.

El día que me asignen me desmayaré. Lo sé. Habrán sido 10 años de lucha (si tenemos la suerte de esperar otros 5 años). 10 años de lucha de verdad no de espera sin más. Lloraré ese día y me desmayaré. La emoción podrá conmigo. Y sólo ese día CONFIRMARÉ  que tanta lucha ha merecido la pena. Confirmaré también que no estoy loca, que uno debe luchar hasta agotarse por aquello que ama.

Y ese día… sin duda alguna… sabré que el hilo rojo fue desenredado totalmente.

Recopilando

La vida cambia día a día e incluso en unas horas se puede dar un giro a nuestra vida. Hoy estamos aquí y quizás mañana no lo estamos; un cambio de trabajo, de residencia, de amigos, un rechazo, una nueva llegada pueden cambiar tu vida en un instante.

No hemos sido asignados. No vamos a viajar en breve… ¡ya pagaba por esperar únicamente 5 años más!

En 2007 decidimos ampliar nuestra familia a través de la adopción. En apenas 6 meses teníamos la idoneidad en nuestra mano y dos meses después de tener la idoneidad teníamos fecha de registro en China. El 28 de julio de 2008 está estampado en aquella solicitud en la que nos ofrecíamos como familia para un peque de Oriente. La adopción no debería basarse en la búsqueda de un hijo para unos padres sino en la búsqueda de unos padres para un niño. Sea como fuere, allí descansan desde entonces nuestros sueños.

Pero la vida cambia y con ella nosotros. Nuestro expediente, aquel que duerme en China cada noche desde julio  de 2008, no refleja la realidad familiar que hoy vivimos, una realidad que ha evolucionado, que ha cambiado… A diferencia de muchas familias de nuestro año que no han comunicado el cambio de sus respectivas situaciones familiares, nosotros sí lo comunicamos. Este simple detalle ha hecho que China en dos ocasiones nos enviara la comunicación de cierre de nuestro expediente. La primera vez fue hace un año y dos meses, pero lo luchamos y la situación quedó paralizada. La segunda vez ha sido hace apenas unas semanas. Fue duro, muy duro, pero gracias a que esta vida nos cambia día a día, aparecieron en nuestro camino unas personas que nos ayudaron a tocar absolutamente  todas las puertas que encontrábamos para mantener vivo este ofrecimiento como familia.  

El cierre de nuestro expediente estaba garantizado en un 90%  pero con 5 años de espera a las espaldas no nos íbamos a dar por vencidos tan rápidamente. Mientras quedara una puerta a la que tocar… la tocaríamos.

La anterior respuesta, negativa a la continuidad de nuestro expediente, tardó un año y dos meses en llegar. Estábamos dispuestos a esperar de nuevo una respuesta durante otro año y dos meses más. Estábamos dispuestos a todo lo que el destino nos tuviera deparado.

Pero los milagros existen. Sí, sí, existen. Y lo hemos vivido en nuestra piel. Debo decir que hemos hecho todo lo que ha estado en nuestra mano (y más) para ayudar a que el milagro se produjera… ¡y se ha producido!

Y así ha sido como en apenas unas semanas hemos recibido una respuesta positiva. Sí, así es. No cerrarán nuestro expediente y además nos mantendrán nuestra fecha de registro. Ahora debemos realizar una serie de trámites adicionales pero los realizaremos rápidamente para poder llegar hasta el final… algún día.

Conforme está la situación de las asignaciones en China somos conscientes de que esperaremos otros 5 años… quizás alguno más pero ahora ya no tendremos la incertidumbre de saber si llegará o no. Ahora sabemos que al menos tendremos la oportunidad de ganarnos llegar a la meta.

Con toda esta situación vivida y debido a que hemos tenido muy mala suerte hasta ahora en este camino, hemos decidido cambiar el expediente que tenemos paralizado desde 2010 en Costa de Marfil por Etiopía. Se abren nuevas puertas, pero no se cierran las que llevan tantos años abiertas.

Espero que en un futuro no muy lejano seamos una familia multirracial. Somos conscientes de que Etiopía llegará antes que China… pero ahora sabemos que no esperamos en vano y que algún día… aún lejano… viajaremos a Oriente, el lugar donde descansan nuestros sueños desde hace ya 5 años.

Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh

Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh hasta ahí puedo leer. Las puertas se abren de par en par. El duelo de hace unas semanas se disipa. Viajaremos a China, sí, sí… viajaremos. No sé cómo ha ocurrido pero el MILAGRO ha ocurrido. Sé que hay muchas, muchísimas personas que sienten la alegría como nosotros con cada uno de nuestros pasos. Y es por ellos por quien cuelgo ahora mismo este mensaje.

Alegre. Estamos alegres. Conmocionados pero alegres, felices… muy alegres. En estos momentos tenemos el alma iluminada puesto que hemos disuelto la espesura de nuestro particular drama.

Desenredando el hilo rojo… y como dice la cabecera del blog… desataré todos los nudos hasta llegar a ti, cueste lo que cueste, pase lo que pase

Sufrir es parir, no adoptar

Sufrir es parir, no adoptar –me dijo sin venir a cuento.

Si, la verdad es que tienes razón –dije-. Evidentemente no tienen ningún sentido exponer ningún tipo de argumentos cuando quien tienes delante ni escucha ni ve ni entiende.

Cuando vas a parir llevas a tu hijo 9 meses en tu vientre pero cuando adoptas llevas a tu hijo en tu alma más de 7 años sin saber si algún día nacerá (este año hará 5 que esperamos en China y, la verdad… siendo optimista faltan otros 5 más).

Cuando vas a parir sufres contracciones en el momento del parto… ¿2 días máximo? Cuando adoptas sufres contracciones cada vez que llega un documento, cada vez que algo se atasca, cada vez que la incertidumbre de si algún día llegará te consume por las noches.

Cuando vas a parir puedes hacer si quieres cursos de preparación al parto pero no te obligan a hacer cursos de formación ni te hacen entrevistas para saber si eres apto como padre. Cuando adoptas no tienes más narices que pasar por esa formación y salir victorioso de unas entrevistas en las que juzgan tus capacidades parentales.

Cuando vas a parir tienes derecho a faltar a tu trabajo para asistir a tu curso de preparación al parto aunque no sea obligatorio. Cuando adoptas, no tienes derecho a tiempo libre a pesar de que tanto la formación como las entrevistas son obligatorias.

Cuando vas a parir no tienes que correr una maratón para enfrentarte a una terrible burocracia que te hace pelearte con los registros civiles, los penales, suplicar a tu jefe que legalice su firma en un papel, encontrar quien te haga cartas de recomendación, legalizaciones, etc, etc. Cuando adoptas… tienes que pasar por todo esto sin falta.

Cuando vas a parir todo tu entorno se preocupa por tu estado de ánimo, te ceden el asiento en el autobús, en el metro, en cualquier sala de espera. Cuando adoptas, a pesar de que estés mareada, exhausta, histérica porque algo se acaba de torcer en tu camino, nadie en absoluto a excepción de quienes caminan contigo en esta andadura te ceden el asiento.

Cuando vas a parir, esperas 9 meses. Cuando adoptas, superas los 5 años. El sufrimiento de 9 meses no es equiparable al de más de 5 años.

Yo tengo una cosa bien clara; El  camino adoptante no es apto para cardiacos; si en la maternidad biológica se vivieran todos los sobresaltos que se viven en la adoptante… el bebé no nacería pero, cuando uno no quiere ver, no merece la pena que le lleves al paraíso.

Y ojo, no digo que parir no sea sufrir, sencillamente digo que el sufrir físico y el sufrir emocional no son comparables.

Palabras

Este mundo adoptante sigue sorprendiéndome. He recibido unas palabras de una persona desconocida pero que sigue mi blog desde hace un tiempo y que ha estado muy pendiente de mi estado de ánimo en estos últimos días animándome, haciéndome sentir acompañada. Y estas son sus preciosas palabras:

"Cuando mires a tu hij@ y sientas que no podría haber sido ningún otro, y bendigas los años de espera, las lágrimas, las noches sin dormir por la incertidumbre... Algún día, que espero que sea muy muy pronto"

Preciosas palabras acompañadas de una preciosa imagen de ella mirando a su hijo... con esa cara de "no podría haber sido ningún otro"

Cambio... hemos pedido un cambio

6.40 de la mañana suena la alarma del móvil. Lo cojo para pararlo y tengo 18 mensajes de una gran compañera-amiga-hermana de aventuras. Me restriego los ojos. No puede ser real... ¿Ha pasado algo? Miro a mi alrededor pero el otro lado de la cama ya está vacío. Pulso para abrir los mensajes... ¡eran mensajes de pasadas las doce de la noche! Ay madre... algo ocurre. 

Empiezo a leer y con las palabras la taquicardia, la emoción, un montón de información se procesa sobre mi cabeza. Sigo leyendo histérica... pero no tengo con quien compartirlo. Puedo contestar pero son las 6.40 de la mañana y no sé si me va a leer, es más... ¡no soy capaz de teclear con acierto en lo que quiero decir!

Era una buena noticia para nosotros. Algo da un giro de un día a otro, cualquier situación, cualquier momento. Me arrepiento de no haber salido ayer escopetada a hacerme las fotos de carné. ¿Por qué no lo hice si hoy voy a necesitarlas? Ay dios... ¡si es que nunca dejo nada para mañana por qué lo he hecho con las fotos! No importa... tengo plan B. 

En apenas 1 hora tenía toda la documentación que necesitaba preparada. Colgada de un teléfono enganchada a mi compañera-amiga-hermana redacto la carta que necesitamos. Es genial tener un cerebro adjunto cuando el tuyo no tiene suficiente riego. Es genial saber que no estás sola en momentos difíciles, en momentos agotadores física y mentalmente. En esos pocos momentos en los que te sientes terriblemente superada. 

Han sido unas cuantas horas de incertidumbre pero ya lo tenemos encauzado. Presentado, admitido y aprobado. El expediente de Costa de Marfil con fecha de registro diciembre 2010 que yacía en algún cajón ha sido sustituido por un expediente nuevo. Un nuevo giro. Un nuevo país. 

En septiembre nos enfrentamos de nuevo a las valoraciones. En septiembre soñaremos con una nueva familia... un nuevo color... un nuevo expediente... una nueva ilusión. 

En ocasiones,  las cosas que no podemos cambiar, acaban cambiándonos a nosotros. ¿Por qué no? Quizás no estábamos preparados, quizás no lo teníamos claro... o sencillamente no era el momento.

Familia de acogida 3

15 llamadas y 0 respuestas positivas. Así es como continúa el periplo de acogimiento. Pero no hay nada como ser insistente y tras insistir que por favor me confirmaran si la persona que se encarga del acogimiento en Alicante no se encontraba hoy en la oficina, en la llamada 16 me han pasado con un departamento en Alicante donde una persona super amable me ha dado los teléfonos directos para contactar con ellos.

Nuestra carta tiene registro el 23 de marzo de 2012. La anterior charla fue en marzo así que en esta no pudimos entrar. Una persona también muy amable me ha comentado que han jubilado a quien se encargaba de esta tarea y que, como no la han sustituido, no dan abasto. Triste saber que somos capaces de gastarnos un millón de euros en un evento deportivo en la Comunidad Valenciana y no reforzar personal para que los menores pasen el menor tiempo posible en un centro sin familia. Pues sí, así es una sociedad. Triste pero es en la que vivimos.

A partir de ahora el procedimiento a seguir será el siguiente:

En septiembre recibiremos una carta en la que nos indicarán que tenemos que asistir a una charla formativa que se celebra por la tarde. Si no podemos asistir, nos citarán dos veces más (tres veces máximo). Es la primera toma de contacto en la que se reúne a unas 9 familias. Allí nos explicarán todo el proceso y responderán todas nuestras dudas.

Tras la primera charla, la formación es de cuatro jueves seguidos por la tarde durante 3 horas. Tras pasar las entrevistas se realizará informe.

Debido a la jubilación de la persona que realizaba esta tarea, todo esto se pospondrá hasta marzo-abril del próximo año, es decir, seremos formados y valorados un año después de presentar la solicitud. Me ha sorprendido (y alegrado) que me comente que se ha producido un aumento en las solicitudes de acogimiento en los últimos meses.

Cambiar

En ocasiones,  las cosas que no podemos cambiar, acaban cambiándonos a nosotros. ¿Por qué no?

Cinturón de seguridad

Tengo que confesar que ayer me quedé OJIPLÁTICA (como suelo decir yo para cuando se me abren los ojos como platos) ante esta noticia:

España: proponen quitar la custodia a quienes lleven a hijos sin cinturón. Podéis leer la noticia aquí

Y mi pregunta es sencilla... ¿hemos perdido el norte? ¿a quién perjudican con esta medida? ¿Piensan llevar a estos niños a familias de acogida o a centros?

¡Por supuesto no comparto en absoluto que los padres descuiden la seguridad de sus hijos bajo ningún concepto! Pero... considero que hay medidas mucho más perjudiciales para los padres (puesto que entiendo que si llevan a sus hijos sin cinturón no velan mucho por ellos, que digamos). ¿Por qué no les quitamos el coche? ¿Por qué no les quitamos el carné? ¿por qué no les mandamos a la cárcel?

Y me pregunto... ¿quitar la custodia a los padres es velar por el interés del menor? ¿En el sentido físico o psicológico?

Un poco más cerca

Hoy,  a pesar del tremendo lío que hay en el hilo rojo... hemos conseguido desenredarlo un poquito. Lo imposible, a veces, da un paso hacia lo posible. Hoy... un poco más cerca. 

PD. Gracias, queridos amigos, por aguantarnos y por ayudarnos a dar un poco de luz a todo esto. Gracias, amigos... por vuestra paciencia, vuestro tiempo, por aguantar nuestras lágrimas y celebrar cada pequeño paso que, en este punto...  es una gran victoria.